Durante una conversaci\u00f3n reciente con mi nieta, surgi\u00f3 el tema de la esencia androc\u00e9ntrica de la Biblia y del Dios que la inspir\u00f3, un Dios que, seg\u00fan mi nieta, relega a las mujeres a un estatus inferior. En respuesta, yo argumentar\u00eda en primer lugar que la Biblia est\u00e1 repleta de mujeres e ilustra el papel fundamental y profundo que desempe\u00f1an en la Palabra de Dios. En Proverbios, por ejemplo, Salom\u00f3n utiliza el pronombre femenino en toda su exposici\u00f3n sobre la sabidur\u00eda (cap\u00edtulos 8-9).<\/p>\n
En segundo lugar, aunque los hombres y las mujeres tienen una humanidad compartida, tambi\u00e9n son \u00fanicos. El dise\u00f1o divino del g\u00e9nero masculino y femenino es binario y complementario, no uniforme. Esto revela algo esencial sobre la naturaleza de Dios, un hecho respaldado por las Escrituras:<\/p>\n
Y Dios cre\u00f3 al ser humano a su imagen; lo cre\u00f3 a imagen de Dios; hombre y mujer los cre\u00f3 (G\u00e9nesis 1:27 NVI).<\/p>\n
Por \u00faltimo, sostengo que la Biblia debe leerse dentro de su contexto cultural y que se presenta para que los humanos podamos comprenderla mejor y relacionarnos con ella en t\u00e9rminos del concepto de Dios. Est\u00e1 claro que Dios no tiene g\u00e9nero. Dios es Esp\u00edritu (Juan 4:24) y opera desde un marco eterno, a diferencia de nosotros los humanos, que operamos dentro de l\u00edmites mundanos y una perspectiva de aqu\u00ed y ahora.<\/p>\n
Dicho de otro modo, envolver nuestros cerebros humanos en la idea de un Creador omnisciente est\u00e1 m\u00e1s all\u00e1 de nuestra capacidad. Por eso nos apoyamos en la fe, el regalo que Dios nos dio, basado en la inspirada o \u00absoplada\u00bb Palabra de Dios (2 Timoteo 3:16) y presentada en un lenguaje con el que podemos identificarnos.<\/p>\n
El prop\u00f3sito de este escrito es llamar la atenci\u00f3n del lector sobre varias de las innumerables mujeres de notable fe y valent\u00eda que s\u00f3lo hacen apariciones breves en las Escrituras, pero que fueron elegidas por Dios para un prop\u00f3sito espec\u00edfico. Sin ellas, la Palabra de Dios estar\u00eda incompleta.\u00a0<\/strong><\/p>\n La Biblia, por supuesto, es un libro sagrado. Sin embargo, puede leerse como una memoria o una novela. Tiene un comienzo, un desarrollo y un final, muchos giros argumentales y personajes extraordinarios. A pesar de su punto de vista profundamente patriarcal, muchos de esos personajes son mujeres tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento.<\/p>\n La mayor\u00eda de nosotros puede mencionar f\u00e1cilmente los nombres de mujeres destacadas en la Biblia: Eva, Sara, Mar\u00eda (madre de Jes\u00fas) y Mar\u00eda Magdalena (la m\u00e1s famosa de las muchas mujeres disc\u00edpulas de Cristo). Muchas otras pasan desapercibidas por el papel fundamental que desempe\u00f1aron en el cumplimiento de las intenciones de Dios y en la transmisi\u00f3n de Su mensaje. \u00c9stas son las mujeres guerreras de la Biblia. Examinaremos m\u00e1s detenidamente a varias de ellas (Rut, D\u00e9bora, Lidia y Priscila) y c\u00f3mo Dios las utiliz\u00f3 para hacer avanzar el reino.<\/p>\n Si no ha le\u00eddo la historia de Rut, se la recomiendo ampliamente. Es breve (s\u00f3lo cuatro cap\u00edtulos) y esclarecedora. Rut es una historia de amor, una historia de devoci\u00f3n, lealtad, compromiso y fidelidad. Rut, al ser bisabuela del rey David, jug\u00f3 un papel esencial en el linaje de Jesucristo. Adem\u00e1s de sus muchos temas, el libro de Rut (quien era una extranjera, una moabita o gentil entre los israelitas) ense\u00f1a que no hay forasteros. Todos contamos a los ojos de Dios y nuestra fidelidad es recompensada con la gracia de Dios.<\/p>\n Debido a la hambruna en Bel\u00e9n de Jud\u00e1, un israelita, Elimelec, lleva a su esposa, Noem\u00ed, y a sus dos hijos a vivir en Moab, una naci\u00f3n pagana. Al paso de los a\u00f1os los hijos se casaron con mujeres moabitas. Despu\u00e9s de la muerte de su marido, y m\u00e1s tarde de sus hijos, Noem\u00ed y sus dos nueras emprenden el regreso a Bel\u00e9n.<\/p>\n S\u00f3lo Rut contin\u00faa el viaje con Noem\u00ed, declarando su fidelidad incondicional a Noem\u00ed, a su pueblo y a su Dios: \u201cA donde quiera que t\u00fa fueres, ir\u00e9 yo. . . Tu pueblo ser\u00e1 mi pueblo, y tu Dios mi Dios\u201d (1:16, 17). Al final, Rut queda \u201ccubierta\u201d por Booz, su pariente redentor (el pariente m\u00e1s cercano obligado a continuar con el apellido) y se casa con \u00e9l, y tiene un hijo, Obed.<\/p>\n Debido a su fidelidad, coraje y perseverancia de un guerrero, Dios honr\u00f3 a Rut d\u00e1ndole un lugar en el linaje de nuestro Se\u00f1or y Salvador, Jesucristo (para m\u00e1s informaci\u00f3n sobre el linaje de Cristo, lea Mateo 1:1-25).<\/p>\n La \u00fanica mujer l\u00edder militar en la Biblia es D\u00e9bora, una guerrera, se podr\u00eda decir. D\u00e9bora era juez y profeta (Jueces 4:4). Durante ese tiempo, los israelitas estaban bajo el gobierno b\u00e1rbaro de Jab\u00edn, un rey cananeo (vv. 1-3).<\/p>\n Siguiendo la palabra de Dios, D\u00e9bora env\u00eda a buscar a Barac desde la ciudad de Cedes y le dice que debe llevar diez mil hombres al monte Tabor para luchar contra el ej\u00e9rcito de Jab\u00edn bajo el mando de S\u00edsara. Barac acepta s\u00f3lo si D\u00e9bora lo acompa\u00f1a. Entonces, junto con Barac, ella lidera el ej\u00e9rcito, profetizando que Barac no tendr\u00eda cr\u00e9dito por la victoria porque en mano de mujer \u201cvender\u00e1 Jehov\u00e1 a S\u00edsara\u201d (vv. 9, 17-23).<\/p>\n La profec\u00eda de D\u00e9bora se cumple cuando S\u00edsara es asesinado por Jael, una mujer. Jab\u00edn es destruido y los israelitas salen victoriosos (vv. 23, 24). Otro ejemplo notable de la influencia y significado que Dios invierte en las mujeres.<\/p>\n Lidia hace una breve aparici\u00f3n en varios vers\u00edculos de Hechos. Aun as\u00ed, de esos vers\u00edculos se ha aprendido mucho que subraya su fidelidad y la mano de Dios en su vida y destino.<\/p>\n No sabemos exactamente qu\u00e9 llev\u00f3 a Lidia desde su ciudad natal de Tiatira (ahora una ciudad en el oeste de Turqu\u00eda) a Filipos en Macedonia, donde el ap\u00f3stol Pablo tambi\u00e9n fue guiado a trav\u00e9s de una visi\u00f3n (Hechos 16:8, 9). Esta fue una reuni\u00f3n fortuita dise\u00f1ada, sin duda, por el Esp\u00edritu Santo, ya que Macedonia fue la primera regi\u00f3n europea donde Pablo predic\u00f3 el evangelio, y donde Lidia se convirti\u00f3 en la primera conversa cristiana documentada.<\/p>\n En Hechos 16, Lucas presenta a Lidia como una mujer importante, una mujer de negocios que acumul\u00f3 una gran riqueza vendiendo telas de color p\u00farpura. En aquellos d\u00edas, era dif\u00edcil conseguir tinte p\u00farpura y s\u00f3lo los ricos pod\u00edan permitirse prendas de color p\u00farpura.<\/p>\n Lidia es descrita como una adoradora de Dios (una gentil que sigui\u00f3 la tradici\u00f3n jud\u00eda sin convertirse por completo). Al escuchar a Pablo, Lidia se convirti\u00f3 al cristianismo junto con toda su casa, y abri\u00f3 su casa a Pablo y a varios ap\u00f3stoles (vv. 14, 15, 40). Lidia es un ejemplo sobresaliente de los dones espirituales de la hospitalidad y la generosidad. Su apoyo financiero, liderazgo, coraje y fidelidad fueron fundamentales para establecer y hacer crecer la iglesia en Filipos.<\/p>\n La \u00faltima mujer notable poco reconocida es Priscila. Se destaca como mujer guerrera en varios frentes. Ella no tuvo miedo como compa\u00f1era de trabajo de Pablo y arriesg\u00f3 su vida por \u00e9l. Ella abri\u00f3 su casa a los ap\u00f3stoles, que se convirti\u00f3 en el lugar para ense\u00f1ar el evangelio (Romanos 16:3-5; 1 Corintios 16:19).<\/p>\n Priscila personifica a las mujeres como compa\u00f1eras en el matrimonio. De acuerdo con el tono hist\u00f3ricamente patriarcal de las Escrituras, nunca se menciona a Priscila independientemente de Aquila, su marido. Por el contrario, ella es reconocida, junto con Aquila, por su compromiso de ense\u00f1ar el mensaje del evangelio (Hechos 18,26), su iniciativa, su fe y su valent\u00eda. Esto habla de su acci\u00f3n y de la amplia esfera de influencia.<\/p>\n La evidencia arqueol\u00f3gica y textual da cr\u00e9dito al intelecto y conocimiento de Priscila y, como proponen varios eruditos, a la supuesta autor\u00eda de Hebreos. Dejando a un lado las discusiones teol\u00f3gicas sobre ese tema, Priscila fue sin duda una mujer destacada de su tiempo y un ejemplo estelar para el nuestro.<\/p>\n Estas son s\u00f3lo cuatro mujeres entre cientos que en su mayor parte no son reconocidas, pero no obstante son mujeres asombrosas de la Biblia. Su fe y fortaleza, y la direcci\u00f3n de Dios, los impulsaron a alturas incomparables.<\/p>\n Mi prop\u00f3sito en este art\u00edculo no es ofrecer una disertaci\u00f3n sobre las vidas de estas mujeres, sino poner de relieve su esencialidad para las Escrituras. Quiz\u00e1s tambi\u00e9n pueda abrir el apetito por una lectura m\u00e1s cercana e intencional de la Biblia, donde usted tambi\u00e9n pueda descubrir cosas y personas que quiz\u00e1s no conoc\u00eda.<\/p>\n \u00a0<\/em><\/p>\n Este art\u00edculo ha sido adaptado de Agape Review<\/em>. Las citas b\u00edblicas son de la Versi\u00f3n Reina – Valera 1960 <\/em>a menos que se indique lo contrario.<\/em><\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" Durante una conversaci\u00f3n reciente con mi nieta, surgi\u00f3 el tema de la esencia androc\u00e9ntrica de la Biblia y del Dios que la inspir\u00f3, un Dios que, seg\u00fan mi nieta, relega a las mujeres a un estatus inferior. 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