Un t\u00edtulo m\u00e1s largo para la historia de mi vida podr\u00eda ser \u201cLa hija pr\u00f3diga de un pastor encuentra el camino a casa despu\u00e9s de trece a\u00f1os de una relaci\u00f3n gay\u201d.<\/p>\n
Toda mi familia y mis amigos se quedaron muy sorprendidos cuando dej\u00e9 a mi marido por una mujer. Me llev\u00f3 mucho tiempo aprender que lo que cre\u00eda que era amor, en realidad no lo era.<\/p>\n
Mi madre me llev\u00f3 a Jes\u00fas a los cuatro a\u00f1os a trav\u00e9s del Libro sin Palabras, una herramienta de evangelizaci\u00f3n para ni\u00f1os. Mi padre asisti\u00f3 a la escuela b\u00edblica y al seminario durante la mayor parte de mi infancia. \u00c9ramos pobres, pero ten\u00edamos una familia eclesi\u00e1stica muy unida. La iglesia en la que crecimos era legalista, pero yo amaba a Jes\u00fas, estudiando la Palabra y escuchando Su dulce voz en mi coraz\u00f3n.<\/p>\n
En mis a\u00f1os de crecimiento me \u201cenamor\u00e9\u201d de algunas de mis maestras. Cuando ten\u00eda quince a\u00f1os, una estudiante de la Biblia era demasiado cari\u00f1osa conmigo. Eso me confundi\u00f3. Cuando crec\u00ed, me gustaban los muchachos, pero tambi\u00e9n me sent\u00eda ligeramente atra\u00edda por personas del mismo sexo. A\u00f1os m\u00e1s tarde, cuando mi matrimonio empez\u00f3 a deteriorarse, busqu\u00e9 una relaci\u00f3n gay. Encontr\u00e9 una, y me llev\u00f3 a terminar mi matrimonio.<\/p>\n
Ha sido dif\u00edcil revisar este periodo de mi vida en el que no caminaba con Jes\u00fas. Mis hijos estaban peque\u00f1os cuando dej\u00e9 a mi esposo. Sent\u00ed que ser\u00edan m\u00e1s felices si yo era feliz (la mentira cultural del momento).<\/p>\n
Mi nueva pareja y yo tuvimos una \u201cbuena vida\u201d durante los a\u00f1os que estuvimos juntas: buenos trabajos, una casa encantadora, grandes amigos y viajes alrededor del mundo. \u00c9ramos modelos de conducta en la comunidad gay. Nos unimos a una iglesia gay y asistimos all\u00ed por diez a\u00f1os. Cant\u00e1bamos cantos cristianos y cre\u00edamos que Jes\u00fas estaba de nuestro lado. Yo cre\u00eda que la Biblia ten\u00eda algunas buenas ideas, pero tambi\u00e9n pensaba que Dios era m\u00e1s grande que la Biblia: Dios es todo amor, \u00bfno es as\u00ed?<\/em> Sin embargo, yo hab\u00eda sacado a Jes\u00fas de mi vida.<\/p>\n A veces, algunas cosas me hac\u00edan dudar de mi estilo de vida, pero las ignoraba y segu\u00eda adelante. No cre\u00eda que pudiera dejar mi estilo de vida y mantenerme firme.<\/p>\n Alertas muy grandes llamaron mi atenci\u00f3n: la grave enfermedad de mi hija, experiencias desilusionantes en la iglesia gay y cosas turbias en las vidas y estilos de vida de mis amigos gays. Tambi\u00e9n hab\u00eda desarrollado un nuevo miedo a la muerte. Al ver c\u00f3mo se desarrollaban acontecimientos mundiales, me preguntaba sobre la profec\u00eda b\u00edblica.<\/p>\n Otra alerta vino a trav\u00e9s de problemas en mi relaci\u00f3n gay. Tuvo altibajos dram\u00e1ticos: muy altos y muy bajos. Con el tiempo, sent\u00eda como si estuviera caminando sobre c\u00e1scaras de huevo con mi pareja, al igual que en mi matrimonio con mi esposo. Me sent\u00eda esclavizada, incapaz de salir, pero desgraciada si me quedaba.<\/p>\n Empec\u00e9 a asistir a las reuniones de Al-Anon y encontr\u00e9 un nombre para mi problema: codependencia<\/em>. Uno de los Doce Pasos consist\u00eda en intentar establecer un contacto consciente con Dios, tal como lo entendemos. Al aquietar mi coraz\u00f3n, empec\u00e9 a darme cuenta de que hab\u00eda convertido a mi pareja en un dios. Tratar de complacerla era todo en mi vida y hab\u00eda sacado a Jes\u00fas de mi vida.<\/p>\n Todas estas alertas culminaron cuando fui a un ministerio ex-gay un fin de semana de primavera a finales de los a\u00f1os 80. Respond\u00ed al llamado al altar y con l\u00e1grimas en los ojos volv\u00ed a Jes\u00fas. Una hermosa sensaci\u00f3n de limpieza, perd\u00f3n y alegr\u00eda llen\u00f3 mi coraz\u00f3n. Volv\u00ed a casa con mi pareja gay y me mud\u00e9 unos d\u00edas despu\u00e9s.<\/p>\n Me gustar\u00eda decir que todo march\u00f3 bien despu\u00e9s de eso, pero mi fe fall\u00f3 en los meses siguientes. No tom\u00e9 tiempo para meditar en la Palabra y en la oraci\u00f3n para alimentar mi caminar con Jes\u00fas. Me sent\u00eda perdida en una iglesia enorme, y ten\u00eda miedo de contarle a alguien sobre mi pasado. Tampoco pude encontrar un grupo de apoyo.<\/p>\n Despu\u00e9s de ese primer a\u00f1o, extra\u00f1aba a mi compa\u00f1era y finalmente volv\u00ed con ella. Vivimos juntas durante un a\u00f1o, pero fue una \u00e9poca terrible. Intentaba \u201cservirle\u201d a ella y a Jes\u00fas al mismo tiempo. Esta vez, cuando me mud\u00e9, fue para siempre.<\/p>\n Afortunadamente, encontr\u00e9 un ministerio de ex-gays que me proporcion\u00f3 un lugar seguro donde pod\u00eda ser abierta y honesta. Ofrec\u00edan oraci\u00f3n, esperanza y sanidad. La gente all\u00ed nos ayud\u00f3 a comprender las ra\u00edces de los problemas de identidad, cosas como necesidades insatisfechas de la infancia, el acoso escolar, los abusos y otras experiencias de la vida. Cuando escucho c\u00f3mo nuestra cultura utiliza el t\u00e9rmino terapia reparadora<\/em> para descartar el poder de Dios para cambiar vidas, me duele el coraz\u00f3n. Este ministerio hizo una gran diferencia para m\u00ed a la hora de encontrar la libertad.<\/p>\n Aprend\u00ed que los problemas de sexualidad e identidad \u201cno son un problema sexual, sino un problema de relaci\u00f3n\u201d. Al pensar en mi relaci\u00f3n gay, me di cuenta de que lo que yo consideraba amor era en realidad una necesidad, un tipo de esclavitud emocional. Sus dram\u00e1ticos altibajos creaban inestabilidad, y mi necesidad de afirmaci\u00f3n me hac\u00eda cautiva de cada una de sus emociones. Mi matrimonio heterosexual ten\u00eda problemas, pero me sent\u00eda mucho m\u00e1s tranquila y libre en el.<\/p>\n Una escritura que ha sido importante para entender mi relaci\u00f3n gay es Romanos 1:25: \u201c[La gente] adoraba y serv\u00eda a los seres creados antes que al Creador\u201d. Aprend\u00ed que los cristianos debemos mantener nuestros ojos en Dios, el Creador, porque cualquier cosa que \u00c9l haya creado puede convertirse en un \u00eddolo.<\/p>\n Uno de los recursos m\u00e1s \u00fatiles para mis luchas fue un peque\u00f1o folleto de Lori Rentzel llamado Emotional Dependency (Dependencia Emocional)<\/em>. A lo largo de los a\u00f1os, en un par de ocasiones sent\u00ed que ca\u00eda en la dependencia emocional, pero afortunadamente no he luchado con pensamientos o tentaciones sexuales. La alarma son\u00f3 cuando sent\u00ed la necesidad de \u201cestar ah\u00ed\u201d para alguien o con la necesidad de sentirme necesitada. He aprendido que el ruido de una adicci\u00f3n a las relaciones puede ahogar a Jes\u00fas. Necesito ser honesta conmigo misma, calmarme con la Palabra y la oraci\u00f3n, y aquietarme para escuchar Su voz durante estos tiempos.<\/p>\n A menudo, Jes\u00fas me empujaba a establecer l\u00edmites. A veces era doloroso distanciarme de una amiga, pero sab\u00eda que Dios la amaba m\u00e1s de lo que yo podr\u00eda. \u00bfQui\u00e9n soy yo para jugar a ser Dios en su vida? Sab\u00eda que, con el tiempo, me sentir\u00eda aliviada y feliz de haber escapado de la adicci\u00f3n a las relaciones, y tambi\u00e9n ser\u00eda mejor para ellas. Jes\u00fas realmente cumple Su promesa de liberarnos, y seremos realmente libres (Juan 8:36).<\/p>\n Jes\u00fas ha estado sanando mi identidad a trav\u00e9s de los a\u00f1os, ense\u00f1\u00e1ndome qui\u00e9n soy en Cristo, y que soy una hija amada de Dios. \u00c9l ha hecho \u201calgo nuevo\u201d en m\u00ed (Isa\u00edas 43:19).<\/p>\n Durante COVID-19, escrib\u00ed mis memorias para mi familia, incluyendo seis nietos. Compart\u00ed esta parte de mi vida porque quer\u00eda que conocieran la libertad que Jes\u00fas puede traer. \u00c9l nos instruye para que le hablemos a las siguientes generaciones de Su fidelidad (Salmo 89:1).<\/p>\n Dios me ha mostrado Su amor a trav\u00e9s de Su cuidado, provisi\u00f3n y protecci\u00f3n en muchas aventuras maravillosas, amigos y compa\u00f1eros de oraci\u00f3n durante estos a\u00f1os de seguirlo. Los viajes misioneros a \u00c1frica, Cambodia y Honduras me dieron la oportunidad de compartir historias del amor y la fidelidad de Dios hacia m\u00ed. \u00a1Jes\u00fas realmente nos da la vida abundante que prometi\u00f3 (Juan 10:10)!<\/p>\n Cuando estaba en ese ministerio ex-gay, anhelaba saber si uno pod\u00eda dejar el estilo de vida gay y no mirar atr\u00e1s. Hoy puedo responder con un rotundo \u201cs\u00ed\u201d y puedo testificar que \u00a1vale la pena! S\u00f3lo lamento esos trece a\u00f1os perdidos y el dolor que trajo a mi familia. Afortunadamente, han tenido la gracia de perdonarme y alabo a Dios por la alegr\u00eda y la bendici\u00f3n que son para m\u00ed.<\/p>\n Durante estos \u00faltimos tres o cuatro a\u00f1os, a pesar de los desaf\u00edos del envejecimiento, COVID, y los problemas de salud, he tenido m\u00e1s tiempo para dedicar a la oraci\u00f3n y a la Palabra. As\u00ed como una hija pr\u00f3diga que regresa a casa, siento que Su susurro se hace m\u00e1s fuerte en mi coraz\u00f3n. Espero que siempre tenga o\u00eddos para escucharlo.<\/p>\n <\/p>\n *El nombre ha sido cambiado. <\/em><\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" Un t\u00edtulo m\u00e1s largo para la historia de mi vida podr\u00eda ser \u201cLa hija pr\u00f3diga de un pastor encuentra el camino a casa despu\u00e9s de trece a\u00f1os de una relaci\u00f3n gay\u201d. Toda mi familia y mis amigos se quedaron muy sorprendidos cuando dej\u00e9 a mi marido por una mujer. 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