Una de las se\u00f1as que m\u00e1s claramente identifica al pueblo de Dios ha sido siempre su llamado a llevar el evangelio a todo el mundo. Por esa raz\u00f3n, todos estamos familiarizados con los versos de la Gran Comisi\u00f3n del Nuevo Testamento: pasajes como Mateo 28:19; Marcos 16:15; y Hechos 1:8, que exponen el prop\u00f3sito y el llamado del pueblo de Dios. Pero a menudo no estamos tan familiarizados con los versos de la Gran Comisi\u00f3n del Antiguo Testamento. El m\u00e1s importante de esos pasajes se encuentra en el libro de Isa\u00edas:<\/p>\n
\u201cUstedes son mis testigos \u2014afirma el\u00a0Se\u00f1or\u2014, son mis siervos escogidos, para que me conozcan y crean en m\u00ed, y entiendan que yo soy. Antes de m\u00ed no hubo ning\u00fan otro dios, ni habr\u00e1 ninguno despu\u00e9s de m\u00ed. Yo, yo soy el\u00a0Se\u00f1or,\u00a0 fuera de m\u00ed no hay ning\u00fan otro salvador. Yo he anunciado, salvado y proclamado .\u202f.\u202f. Ustedes son mis testigos \u2014afirma el\u00a0Se\u00f1or\u2014, y yo soy Dios (43:10-12).<\/p>\n
El contexto de estos versos es legal: Dios presenta una acusaci\u00f3n contra los que se niegan a reconocerlo (vv.\u202f8, 9) y llama a Su pueblo como testigos de Su existencia, obra salvadora y naturaleza (vv.\u202f10-13). Aunque el cumplimiento inmediato de estos versos se aplic\u00f3 al pueblo del antiguo Israel, est\u00e1 claro que Israel fracas\u00f3 en esta comisi\u00f3n (vv.\u202f26-28).<\/p>\n
Tambi\u00e9n est\u00e1 claro que el pasaje tiene una aplicaci\u00f3n m\u00e1s amplia al pueblo de Dios en una \u00e9poca posterior. De hecho, apenas unos versos despu\u00e9s de declarar Su comisi\u00f3n, Isa\u00edas registra la promesa de Dios: \u201cDerramar\u00e9 mi Esp\u00edritu sobre tu descendencia, y mi bendici\u00f3n sobre tus v\u00e1stagos\u201d (44:3). Esto significa el Israel espiritual que asumir\u00eda la comisi\u00f3n (G\u00e1latas 6:16), tambi\u00e9n predicha por el profeta Joel y citada por Pedro en la fundaci\u00f3n de la iglesia del Nuevo Testamento (Hechos 2:17).<\/p>\n
Isa\u00edas esboza cuatro grandes principios sobre el llamado de Dios a Su pueblo como testigo. El profeta nos dice que el pueblo de Dios es…<\/p>\n
Imperfecto.<\/em> A veces podr\u00edamos pensar que no somos lo suficientemente buenos para servir como testigos de Dios, pero el contexto del pasaje de la Gran Comisi\u00f3n de Isa\u00edas muestra que a pesar de sus fracasos, Dios deseaba cubrir los pecados de Su pueblo y a\u00fan as\u00ed hacer que le sirvieran. Dios les dijo: \u201cMe hab\u00e9is cargado con vuestros pecados y me hab\u00e9is fatigado con vuestras ofensas\u201d (43:24). Pero continu\u00f3: \u201cYo soy el que por amor a m\u00ed mismo borra tus transgresiones y no se acuerda m\u00e1s de tus pecados\u201d (v.\u202f25).<\/p>\n Dios no eligi\u00f3 a personas lo suficientemente \u201cperfectas\u201d para ser Sus testigos. De hecho, les ofreci\u00f3 Su Gran Comisi\u00f3n mientras estaban en cautiverio en Babilonia, resultado de sus pecados anteriores. A pesar de estos antecedentes, Dios los llam\u00f3, defectuosos como eran, para que dieran testimonio de \u00c9l. No esper\u00f3 a que Su pueblo fuera perfecto, sino simplemente a que estuviera arrepentido.<\/p>\n Elegidos. <\/em>A pesar de nuestra naturaleza defectuosa, Dios tambi\u00e9n enfatiz\u00f3 a trav\u00e9s de Isa\u00edas que nos ha llamado de acuerdo con Sus prop\u00f3sitos divinos. El comienzo mismo de Isa\u00edas 43 se\u00f1ala este punto con algunas de las palabras m\u00e1s alentadoras del Antiguo Testamento:<\/p>\n \u201cNo temas, que yo te he redimido; te he llamado por tu nombre; t\u00fa eres m\u00edo . . . Porque te amo y eres ante mis ojos precioso y digno de honra .\u202f. .\u201d (vv. 1, 4).<\/p>\n Dios nos eligi\u00f3 de acuerdo a Su propia voluntad y prop\u00f3sito y llama a Su pueblo \u201cmis siervos escogidos\u201d (v.\u202f10). Este es el mismo mensaje que Jes\u00fas reiter\u00f3 a Sus disc\u00edpulos con respecto a \u00c9l mismo, profetizado en Isa\u00edas (Mateo 12:17, 18), y con respecto a Sus disc\u00edpulos (Juan 13:16). Aunque Jes\u00fas dej\u00f3 claro que consideraba a Sus disc\u00edpulos tanto amigos como siervos (15:15), seguimos siendo siervos elegidos y llamados a servir (18:36).<\/p>\n Creyentes.<\/em> A continuaci\u00f3n, Dios le dice a Su pueblo algo que merece una cuidadosa reflexi\u00f3n: \u201cUstedes son mis testigos .\u202f.\u202f. para que me conozcan y crean en m\u00ed, y entiendan que yo soy\u201d (Isa\u00edas 43:10).<\/p>\n Si leemos este verso cuidadosamente, vemos algo sorprendente. Dios no dice: \u201c Ustedes son mis testigos .\u202f.\u202f. para que otros me conozcan y crean\u201d, sino \u201cpara que ustedes me conozcan y crean\u201d.<\/p>\n En otras palabras, cuanto mejor conozcamos a Dios, mejor podremos servirle como Sus testigos. De alguna manera, actuar como sus testigos y siervos abre nuestras mentes a una creencia m\u00e1s profunda en Dios y al conocimiento de Sus caminos. Damos testimonio y servimos, nos dice Isa\u00edas, \u201cpara que\u201d podamos llegar a entender mejor a Dios, y entonces, a su vez, dar un mejor testimonio y servicio. La Gran Comisi\u00f3n de Dios nos afecta tanto a nosotros como a los dem\u00e1s.<\/p>\n Testigos.<\/em> Tristemente, en los tiempos del Nuevo Testamento, muchos en la naci\u00f3n que Dios hab\u00eda llamado se enfocaban en el hecho de que eran el pueblo elegido, no en lo que eran elegidos para hacer. Sin embargo, hablando a trav\u00e9s de Isa\u00edas, Dios hab\u00eda dejado claro que el pueblo que eligi\u00f3 fue llamado no s\u00f3lo para servirle, sino tambi\u00e9n para servir como Sus testigos. Dios declar\u00f3 esta verdad repetidamente. As\u00ed como el pasaje de la Gran Comisi\u00f3n de Isa\u00edas 43 comienza con \u201c Ustedes son mis testigos \u201c, afirma el SE\u00d1OR (v.\u202f10), termina exactamente de la misma manera (v.\u202f12). La afirmaci\u00f3n se repite de nuevo poco despu\u00e9s: \u201cUstedes son mis testigos\u201d (44:8).<\/p>\n El pasaje de la Gran Comisi\u00f3n de Isa\u00edas deja claro que el pueblo de Dios deb\u00eda servir de testigo en Su nombre. Tambi\u00e9n muestra cu\u00e1l deb\u00eda ser el mensaje de ese testimonio. A trav\u00e9s del profeta, Dios resumi\u00f3 el mensaje de una manera particularmente poderosa: \u201cYo, yo soy el Se\u00f1or .\u202f.\u202f. Yo he anunciado, salvado y proclamado .\u202f.\u202f. ustedes son mis testigos\u201d (43:11, 12).<\/p>\n Las tres cosas que Dios enfatiza en este pasaje deb\u00edan ser el n\u00facleo de la identidad de Su pueblo como testigos: la revelaci\u00f3n de la existencia de Dios, la oferta de Su salvaci\u00f3n y la proclamaci\u00f3n de Su naturaleza justa y forma de vida.<\/p>\n Esta Gran Comisi\u00f3n del Antiguo Testamento se convierte, por supuesto, en la Gran Comisi\u00f3n del Nuevo. Esto queda claro cuando comparamos Isa\u00edas 43:10-12 con las escrituras pertinentes del Nuevo Testamento, especialmente las \u00faltimas palabras de Jes\u00fas a Sus disc\u00edpulos antes de Su ascensi\u00f3n: \u201cSer\u00e1n mis testigos tanto en Jerusal\u00e9n como en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra\u201d (Hechos 1:8).<\/p>\n Bajo la superficie, vemos una serie de similitudes espec\u00edficas entre el mensaje de la Gran Comisi\u00f3n de Isa\u00edas y el del Nuevo Testamento. Por ejemplo, a trav\u00e9s de Isa\u00edas Dios dice: \u201cYo soy. Antes de m\u00ed no hubo ning\u00fan otro dios, ni habr\u00e1 ninguno despu\u00e9s de m\u00ed\u201d (43:10). Las palabras \u201cYo soy\u201d son las mismas que Jes\u00fas declara de S\u00ed mismo en Juan 8:24 y 13:19 y que se encuentran en la traducci\u00f3n de la Septuaginta griega de Isa\u00edas 43:10.<\/p>\n El ap\u00f3stol Pablo resume el mensaje cristiano:<\/p>\n El evangelio .\u202f.\u202f. es poder de Dios para la salvaci\u00f3n de todos los que creen: de los jud\u00edos primeramente, pero tambi\u00e9n de los gentiles. De hecho, en el evangelio se revela la justicia que proviene de Dios, la cual es por fe de principio a fin (Romanos 1:16, 17).<\/p>\n Este es el mismo mensaje de Isa\u00edas 43: la revelaci\u00f3n de la existencia de Dios (\u201cel poder de Dios\u201d), la salvaci\u00f3n de Dios (\u201cla salvaci\u00f3n de todo el que cree\u201d), y la naturaleza justa de Dios y Su forma de vida (\u201cla justicia de Dios\u201d).<\/p>\n El resumen evang\u00e9lico del ap\u00f3stol Pablo sobre la revelaci\u00f3n del poder, la salvaci\u00f3n y la justicia de Dios en Cristo se inspira directamente en el mensaje evang\u00e9lico global y prof\u00e9tico de Isa\u00edas (cf. Isa\u00edas 40:9; 51:4-6; 52:7, 10; 56:1; 59:16, 17; 62:1, 2).<\/p>\n En \u00faltima instancia, el testimonio del Nuevo Testamento es totalmente coherente con el mensaje del Antiguo Testamento en Isa\u00edas: Se nos instruye para que demos testimonio de la existencia del Hijo de Dios, de la salvaci\u00f3n que viene por medio de \u00c9l, y de la proclamaci\u00f3n de Su naturaleza y del modo de vida que ordena. No hay ninguna diferencia esencial, porque Dios desea ahora, al igual que entonces, que \u201ctodos los pueblos se salven y lleguen al conocimiento de la verdad\u201d (1\u202fTimoteo 2:4; cf. G\u00e9nesis 12:3). Otra vez Isa\u00edas:<\/p>\n En aquel d\u00eda se dir\u00e1: \u00a1S\u00ed, este es nuestro Dios; en \u00e9l confiamos, y \u00e9l nos salv\u00f3! \u00a1Este es el SE\u00d1OR, en \u00e9l hemos confiado; regocij\u00e9monos y alegr\u00e9monos en su salvaci\u00f3n!\u201d (25:9).<\/p>\n En aquel d\u00eda se dir\u00e1: \u201cAlaben al SE\u00d1OR, invoquen su nombre; den a conocer entre los pueblos sus obras; proclamen la grandeza de su nombre\u201d (12:4).<\/p>\n Esa es la Gran Comisi\u00f3n dada al pueblo del evangelio – tanto antes como ahora. \u201cEse d\u00eda\u201d de Isa\u00edas es hoy, as\u00ed que proclam\u00e9moslo.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" Una de las se\u00f1as que m\u00e1s claramente identifica al pueblo de Dios ha sido siempre su llamado a llevar el evangelio a todo el mundo. 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