{"id":29039,"date":"2022-09-30T00:00:36","date_gmt":"2022-09-30T06:00:36","guid":{"rendered":"https:\/\/baonline.cog7engage.net\/?p=29039"},"modified":"2023-08-29T11:43:36","modified_gmt":"2023-08-29T17:43:36","slug":"manso-como-caballo-de-guerra","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/baonline.cog7engage.net\/es\/manso-como-caballo-de-guerra\/","title":{"rendered":"Manso – Como Caballo de Guerra"},"content":{"rendered":"
Mansedumbre<\/em> y caballo<\/em> de guerra parecen ser t\u00e9rminos muy contradictorios. Los caballos de guerra son intr\u00e9pidos, listos para pelear en la batalla, mientras que la mansedumbre a menudo se equipara con cobard\u00eda, timidez y debilidad. De hecho, Merriam-Webster define manso como \u201cdeficiente en esp\u00edritu y coraje, no violento ni fuerte\u201d. Enumera sin\u00f3nimos como humilde, modesto, reservado, y sin pretensiones.<\/p>\n Y, sin embargo, estos ejemplos b\u00edblicos parecen contradecir tal definici\u00f3n:<\/p>\n Considere el significado original y el uso de la palabra manso. La Concordancia de Strong enumera la palabra griega como praus. Seg\u00fan algunas fuentes, esta palabra se asoci\u00f3 con el acto de domar a los caballos. Los sementales salvajes eran capturados en las monta\u00f1as y los llevaban para ser domados y entrenados para una variedad de usos. Era imperativo que los caballos conservaran su esp\u00edritu, coraje y poder. Pero sin disciplina y obediencia total, esas cualidades eran in\u00fatiles.<\/p>\n De hecho, los mejores caballos estaban reservados para la guerra, donde su coraje para correr hacia la batalla era esencial. Un caballo de guerra que no respond\u00eda inmediatamente a una orden era de poco valor y en realidad pon\u00eda en peligro a su jinete. Estos caballos de guerra ejemplificaron un gran poder bajo control.<\/p>\n Tomados desde un punto de total desenfreno o rebeli\u00f3n, esos animales eran transformados en herramientas fuertes pero obedientes. Ejemplificaban la verdadera mansedumbre y hab\u00edan sido transformados de la obstinaci\u00f3n desenfrenada al coraje y la sumisi\u00f3n en situaciones de peligro extremo.<\/p>\n Mois\u00e9s mostr\u00f3 mucho valor, aunque un poco a rega\u00f1adientes, cuando Dios le encarg\u00f3 que fuera a ver a Fara\u00f3n. Es dif\u00edcil imaginar regresar repetidamente a la corte del hombre m\u00e1s poderoso de la tierra y exigir la liberaci\u00f3n de miles de esclavos. Cada vez que comparec\u00eda ante Fara\u00f3n era despu\u00e9s de la \u00faltima plaga devastadora que Dios hab\u00eda lanzado sobre la tierra.<\/p>\n Despu\u00e9s de la liberaci\u00f3n de los israelitas, los problemas no terminaron. Mientras se enfrentaba al Mar Rojo por delante y al ej\u00e9rcito de Fara\u00f3n por detr\u00e1s, Mois\u00e9s mostr\u00f3 el mismo poder controlado, instruyendo a los israelitas: \u201cNo tem\u00e1is; estad firmes, y ved la salvaci\u00f3n que Jehov\u00e1 har\u00e1 hoy con vosotros .\u202f.\u202f. Jehov\u00e1 pelear\u00e1 por vosotros, y vosotros estar\u00e9is tranquilos\u201d (\u00c9xodo 14:13, 14).<\/p>\n Note la confianza en esas palabras: \u201cved la salvaci\u00f3n de Jehov\u00e1\u201d y \u201cJehov\u00e1 har\u00e1 hoy con vosotros\u201d (\u00e9nfasis m\u00edo). No hab\u00eda duda, ninguna vacilaci\u00f3n en esas palabras.<\/p>\n Otro ejemplo de la fuerza tranquila de Mois\u00e9s fue cuando el Se\u00f1or amenaz\u00f3 con destruir a Su pueblo en el Monte Sina\u00ed. Disgustado por la rapidez con la que se hab\u00edan vuelto del \u00fanico Dios verdadero a un becerro de oro, con ira Dios declar\u00f3 que deseaba destruirlos y convertir a Mois\u00e9s en una gran naci\u00f3n. En lugar de pensar en s\u00ed mismo, Mois\u00e9s le rog\u00f3 a Dios que lo reconsiderara, y as\u00ed lo hizo (32:9-14).<\/p>\n Avancemos unos cuantos miles de a\u00f1os hasta otro Hombre que enfrent\u00f3 un peligro extremo con valent\u00eda y sigui\u00f3 la direcci\u00f3n de Dios. Jes\u00fas enfrent\u00f3 repetidamente a los fariseos. Constantemente lo reprendian, se burlaban y lo condenaron, criticaban cada uno de Sus movimientos y finalmente se aseguraron de que fuera golpeado y crucificado. Jes\u00fas nunca dej\u00f3 de se\u00f1alar sus faltas, \u00c9l los enfront\u00f3 en muchas ocasiones con una fuerza tranquila. Me llaman la atenci\u00f3n tres escenas:<\/p>\n En tales situaciones, la respuesta natural es defendernos, explicar c\u00f3mo hemos sido maltratados o incomprendidos, luchar, al menos verbalmente, con quienes se nos oponen. Con demasiada frecuencia, esos argumentos suben de tono o se vuelven acalorados, definitivamente sin mostrar un control apacible.<\/p>\n La calma es fuerza. Cuanto m\u00e1s ruidosamente nos defendamos o tratemos de controlar una situaci\u00f3n, menos control ejemplificaremos. La aparici\u00f3n de Cristo ante los principales sacerdotes y el concilio no habr\u00eda sido tan efectiva si \u00c9l hubiera proclamado a gritos Su inocencia. Sus respuestas tranquilas demostraron qui\u00e9n estaba realmente a cargo.<\/p>\n Para vivir como testigos cristianos efectivos, necesitamos aprender la verdadera mansedumbre: permitir que el Esp\u00edritu Santo controle nuestras lenguas y nuestras acciones, para pensar no en qui\u00e9nes somos sino de Qui\u00e9n somos. Necesitamos ser como los caballos de guerra, listos para pelear en la batalla, no relinchando ni sacudiendo la cabeza sin control, sino enfoc\u00e1ndonos en nuestro Maestro. Debemos aprender a someter nuestra voluntad con mansedumbre a la Suya y aprovechar Su fuerza, en lugar de tratar de hacerlo por nuestra cuenta.<\/p>\n Esa total obediencia no llega f\u00e1cilmente. De hecho, requerimos que Su Esp\u00edritu gu\u00ede nuestras vidas. Pero es esencial si queremos comprometernos totalmente a Cristo.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" Mansedumbre y caballo de guerra parecen ser t\u00e9rminos muy contradictorios. 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Definici\u00f3n b\u00edblica<\/h2>\n
La mansedumbre del Antiguo Testamento<\/h2>\n
La mansedumbre del Nuevo Testamento<\/h2>\n
\n
Tranquilo y valiente<\/h2>\n