{"id":28534,"date":"2022-05-20T00:00:42","date_gmt":"2022-05-20T06:00:42","guid":{"rendered":"https:\/\/baonline.cog7engage.net\/?p=28534"},"modified":"2023-08-29T11:43:57","modified_gmt":"2023-08-29T17:43:57","slug":"herido","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/baonline.cog7engage.net\/es\/herido\/","title":{"rendered":"Herido"},"content":{"rendered":"
La vida est\u00e1 llena de buenas y malas experiencias. Las buenas no nos afectan tanto como las malas. A menudo, las malas experiencias nos dejan heridas causadas \u200b\u200bpor la p\u00e9rdida de un ser querido, el abuso f\u00edsico, la enfermedad y la injusticia. Muchas veces estas heridas no cicatrizan; permanecen abiertas durante mucho tiempo.<\/p>\n
A veces nos sentimos como Jenny en la pel\u00edcula Forrest Gump. Ella es amiga de Forrest y su padre ha estado abusando sexualmente de ella. Despu\u00e9s de que \u00e9l es arrestado, Jenny se va a vivir con otra persona, pero sus luchas con lo que su padre le hab\u00eda hecho solo hab\u00edan comenzado. De hecho, pasa el resto de su vida tratando de recuperarse del da\u00f1o que le hab\u00eda causado.<\/p>\n
A\u00f1os despu\u00e9s, Jenny regresa al peque\u00f1o pueblo donde hab\u00eda crecido para visitar a Forrest. Ambos, ahora de treinta a\u00f1os, caminan cerca de la casa donde ella hab\u00eda vivido. Al ver la casa, Jenny inmediatamente se ve inundada por dolorosos recuerdos del abuso, recuerdos que han existido durante mucho tiempo. Ella comienza a llorar de dolor y enojo y arroja sus zapatos a la casa. Luego avienta piedras. Cuando se queda sin piedras, cae al suelo, llorando.<\/p>\n
Reflexionando sobre lo que acababa de suceder, Forrest dice: \u201cSupongo que a veces no hay suficientes piedras\u201d.<\/p>\n
La Biblia habla del sufrimiento que Jesucristo experiment\u00f3 en la tierra, pero no arremeti\u00f3 con dolor e ira como lo hizo Jenny. Mateo 20:17-19 describe Su \u00faltima parada en Jerusal\u00e9n y tambi\u00e9n algunos de los eventos que tendr\u00edan lugar all\u00ed en un futuro cercano. Jerusal\u00e9n era el centro del juda\u00edsmo en ese momento y el s\u00edmbolo de un pueblo dominado por el Imperio Romano. Era el destino final de Jes\u00fas donde ser\u00eda traicionado, condenado a muerte y crucificado. El lugar donde los disc\u00edpulos lo abandonar\u00edan y Pedro lo negar\u00eda.<\/p>\n
Jes\u00fas fue crucificado, tal como lo predijo. Pero Su muerte no fue el final. Dios hab\u00eda preparado algo que trascender\u00eda la historia humana: la resurrecci\u00f3n del cuerpo crucificado de Cristo. A pesar de este milagro de nueva vida, Jes\u00fas carg\u00f3 con las cicatrices de Sus heridas. De hecho, terminaron convirti\u00e9ndose en las se\u00f1ales que lo identifican (Juan 20:20-29). Sus cicatrices son permanentes.<\/p>\n
Esta verdad es significativa para nosotros. La Resurrecci\u00f3n no despoja a Jes\u00fas de Su condici\u00f3n humana exterior. Proporciona continuidad entre el pasado y el presente. Jes\u00fas contin\u00faa uni\u00e9ndose a cada uno de nosotros en nuestro sufrimiento.<\/p>\n
Jes\u00fas ten\u00eda la opci\u00f3n de descender de la cruz, pero no lo hizo. \u00c9l prefiri\u00f3 estar con nosotros. Aunque regres\u00f3 al cielo, lleva nuestras heridas causadas por la enfermedad y la injusticia. De esa manera, \u00c9l nos consuela y nos sana de lo que nos ha causado da\u00f1o.<\/p>\n
En otra escena de Forrest Gump, Jenny, de cinco a\u00f1os, huye de su padre borracho y le pide a Dios que la convierta en un p\u00e1jaro para poder volar lejos de all\u00ed. Nosotros tambi\u00e9n podemos ser as\u00ed, con el dolor y la ira da\u00f1ando nuestros corazones. A veces, una voz enojada dentro de nosotros grita: \u00a1Dios, esto no es justo! No est\u00e1 bien. \u00bfQu\u00e9 hice para merecer esto?<\/p>\n
Algunas heridas son emocionales, psicol\u00f3gicas y f\u00edsicas, y a menudo nada puede curarlas; s\u00f3lo Dios puede. A veces vivimos con resentimiento hacia Dios porque desear\u00edamos haber nacido en un lugar diferente o en una familia diferente, con mejores oportunidades de educaci\u00f3n o trabajo.<\/p>\n
La mayor\u00eda de nosotros llevamos heridas que experimentamos a lo largo de la vida, y tenemos las cicatrices de un cuerpo que logr\u00f3 sanar. Estas pueden verse de dos maneras: podemos revivir el dolor, el miedo o la ira que nos causaron y caer en la amargura, o podemos mirar m\u00e1s all\u00e1 de ellas y agradecer que fuimos rescatados de cualquier amenaza inminente.<\/p>\n
Mientras estaba en la cruz, Jes\u00fas enfrent\u00f3 el abandono del Padre. \u201cDios m\u00edo, Dios m\u00edo, \u00bfpor qu\u00e9 me has desamparado?\u201d (Mateo 27:45, 46), Jes\u00fas clam\u00f3, no solo por S\u00ed mismo, sino tambi\u00e9n por nosotros. A trav\u00e9s de ese grito, Jes\u00fas expres\u00f3 a Dios nuestro dolor, sufrimiento por la injusticia, la soledad, la discriminaci\u00f3n, la enfermedad y el miedo a la muerte.<\/p>\n
Viktor Frankl, un psiquiatra jud\u00edo, fue capturado por los nazis y llevado a Auschwitz. En su libro El Hombre en Busca de Sentido (Man\u2019s Search for Meaning<\/em>) cuenta c\u00f3mo sus padres y su esposa murieron en diferentes campos de concentraci\u00f3n. \u00c9l experiment\u00f3 hambre, fr\u00edo y maltrato f\u00edsico y psicol\u00f3gico. Los campos de concentraci\u00f3n estaban rodeados de cercas el\u00e9ctricas y, en varias ocasiones, Frankl tuvo ganas de suicidarse. Pero en alg\u00fan momento se dio cuenta de su prop\u00f3sito en el mundo, y al final sobrevivi\u00f3, gracias a que Dios estaba con \u00e9l.<\/p>\n No importa cu\u00e1n grande sea nuestro sufrimiento, no tenemos que enfrentarlo solos. La gracia y el amor de Dios han estado con nosotros todo el tiempo. Como prueba de ello, aqu\u00ed estamos, tal vez enfermos, sin trabajo y en duelo, pero Dios est\u00e1 presente en nuestras vidas.<\/p>\n Dios sabe que cada uno de nosotros est\u00e1 experimentando ese viaje de pasar por nuestra propia Jerusal\u00e9n. Tal vez est\u00e9 lidiando con la soledad, la falta de trabajo, la enfermedad o el divorcio. Quiz\u00e1 por impotencia est\u00e1 clamando: \u201cDios m\u00edo, Dios m\u00edo, \u00bfpor qu\u00e9 me has desamparado?\u201d<\/p>\n Todos podemos sentirnos as\u00ed. En una ocasi\u00f3n, un hermano de la iglesia que hab\u00eda sufrido con su familia los efectos del virus, dijo: \u201cSomos sobrevivientes de COVID-19\u201d. Todos somos sobrevivientes de todas las heridas causadas por diferentes circunstancias de la vida.<\/p>\n Es cierto lo que dijo Forrest Gump: A veces simplemente no hay suficientes piedras. Pero no las necesitamos. Somos sobrevivientes victoriosos por la gracia de Dios a trav\u00e9s del Cristo crucificado y resucitado.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" La vida est\u00e1 llena de buenas y malas experiencias. Las buenas no nos afectan tanto como las malas. A menudo, las malas experiencias nos dejan heridas causadas \u200b\u200bpor la p\u00e9rdida de un ser querido, el abuso f\u00edsico, la enfermedad y la injusticia. Muchas veces estas heridas no cicatrizan; permanecen abiertas durante mucho tiempo. A veces […]<\/p>\n","protected":false},"author":1584,"featured_media":28530,"comment_status":"closed","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"sync_status":"","episode_type":"","audio_file":"","castos_file_data":"","podmotor_file_id":"","cover_image":"","cover_image_id":"","duration":"","filesize":"","filesize_raw":"","date_recorded":"","explicit":"","block":"","footnotes":""},"categories":[635,2091],"tags":[],"yoast_head":"\n