{"id":28368,"date":"2022-03-25T00:00:28","date_gmt":"2022-03-25T06:00:28","guid":{"rendered":"https:\/\/baonline.cog7engage.net\/?p=28368"},"modified":"2023-08-29T11:44:05","modified_gmt":"2023-08-29T17:44:05","slug":"dos-burros","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/baonline.cog7engage.net\/es\/dos-burros\/","title":{"rendered":"Dos Burros"},"content":{"rendered":"
\u00bfAlguna vez ha le\u00eddo la incre\u00edble y peque\u00f1a profec\u00eda de G\u00e9nesis 49:8-12? Su sorprendente predicci\u00f3n de parte de la historia del evangelio puede no serle tan familiar. Contiene uno de los primeros pron\u00f3sticos de la obra vivificante de Jes\u00fas en la cruz:<\/p>\n
Jud\u00e1, te alabar\u00e1n tus hermanos; tu mano en la cerviz de tus enemigos; los hijos de tu padre se inclinar\u00e1n a\u00a0\u00a0 ti.\u00a0Cachorro de le\u00f3n, Jud\u00e1; de la presa subiste, hijo m\u00edo.<\/p>\n
Se encorv\u00f3, se ech\u00f3 como le\u00f3n, as\u00ed como le\u00f3n viejo: \u00bfqui\u00e9n lo despertar\u00e1?<\/p>\n
No ser\u00e1 quitado el cetro de Jud\u00e1, ni el legislador de entre sus pies, hasta que venga Siloh;<\/p>\n
Y a \u00e9l se congregar\u00e1n los pueblos.<\/p>\n
Atando a la vid su pollino, y a la cepa el hijo de su asna, lav\u00f3 en el vino su vestido, y en la sangre de uvas su manto. Sus ojos, rojos del vino, y sus dientes blancos de la leche.<\/p>\n
En G\u00e9nesis 49, Jacob bendice a sus hijos antes de morir. Jud\u00e1 ser\u00e1 muy alabado y ocupar\u00e1 un lugar prominente entre las tribus de Israel (v. 8). Se le asemeja a un le\u00f3n (v. 9). Jud\u00e1 ser\u00e1 la tribu gobernante hasta que venga Siloh (v. 10). Tanto los te\u00f3logos jud\u00edos como los cristianos creen que Siloh es el Mes\u00edas y, de hecho, un Mes\u00edas gobernante a quien la gente obedece. \u00c9l montar\u00e1 un burro y un pollino justo antes de lavar Su ropa en vino y en sangre de uvas (v. 11).<\/p>\n
Con esto en mente, es interesante lo que leemos acerca de Jes\u00fas en Mateo 21:1, 2. Misteriosamente arregla dos burros para Su entrada a Jerusal\u00e9n, justo antes de que las multitudes lo reciban como rey y Sus ropas est\u00e9n cubiertas de sangre en la cruz. Tambi\u00e9n sabemos que Jes\u00fas era de la tribu de Jud\u00e1 y que era llamado el Le\u00f3n de la tribu de Jud\u00e1 (Apocalipsis 5:5).<\/p>\n
Adem\u00e1s, como predijo la profec\u00eda, Jud\u00e1 fue en verdad la tribu prominente de Israel hasta la \u00e9poca en que vivi\u00f3 Jes\u00fas. \u00bfPodr\u00eda ser que la menci\u00f3n de G\u00e9nesis 49:11 de lavar Su ropa en vino y la sangre de las uvas fuera una forma po\u00e9tica de profetizar que el Mes\u00edas tendr\u00eda una muerte sangrienta?<\/p>\n
Estoy seguro de que lo es.<\/p>\n
Esta profec\u00eda temprana, hecha de manera m\u00e1s impresionante antes de que Jud\u00e1 y sus hermanos se establecieran como tribus en Israel, quiz\u00e1s no sea tan conocida como la profec\u00eda de los dos burros en Zacar\u00edas 9:9:<\/p>\n
Al\u00e9grate mucho, hija de Sion; da voces de j\u00fabilo, hija de Jerusal\u00e9n; he aqu\u00ed tu rey vendr\u00e1 a ti, justo y salvador, humilde, y cabalgando sobre un asno, sobre un pollino hijo de asna.<\/p>\n
Los cr\u00edticos pueden tratar de restar importancia al esplendor de esta profec\u00eda mencionada en Mateo 21:5, al sugerir que cualquiera podr\u00eda haber arreglado dos burros y proclamado ser el Mes\u00edas. Sin embargo, solo alguien especial podr\u00eda haber generado el tipo de respuesta que Jes\u00fas hizo mientras montaba un burro en Jerusal\u00e9n.<\/p>\n
Mateo 21 describe lo que se conoce como la entrada triunfal. Todo en este cap\u00edtulo clama al Rey Jes\u00fas, a quien la gente debe obedecer. La alfombra roja, por as\u00ed decirlo, se despliega ante Jes\u00fas mientras monta el burro y la multitud extiende sus ropas y palmas en el camino frente a \u00c9l. Esto recuerda a Salom\u00f3n, el hijo del rey David, montado en la mula de David cuando asum\u00eda el trono como rey de Israel. La multitud en ese entonces gritaba: \u201c\u00a1Viva el rey Salom\u00f3n!\u201d (1\u202fReyes 1:38-40). Ahora la multitud clama al Rey Jes\u00fas: \u201c\u00a1Hosanna al Hijo de David!\u201d En el relato paralelo de su Evangelio, Lucas los registra gritando: \u201c\u00a1Bendito el Rey que viene en el nombre del SE\u00d1OR!\u201d (19:38).<\/p>\n
Por Sus acciones, Jes\u00fas tambi\u00e9n muestra Su autoridad real al expulsar a los cambistas injustos de la casa de Su Padre (Mateo 21:12-14). Demuestra poder Mesi\u00e1nico al sanar a los ciegos y cojos all\u00ed. Incluso los ni\u00f1os declaran que \u00c9l es el Hijo de David. \u00a1Todo clama, Rey! Por el camino de la cruz a Su muerte, Jes\u00fas estar\u00eda en camino a ser levantado (resucitado) para sentarse en el trono de David, exaltado a la diestra de Dios (Hechos 2:30-33).<\/p>\n
La profec\u00eda del evangelio de Jacob en G\u00e9nesis 49 tambi\u00e9n es especial porque nos habla de un gran gobernante que se humilla a S\u00ed mismo como siervo debido a Su gran amor por nosotros. \u00c9l no solo se sienta humildemente sobre un burro, sino mucho m\u00e1s que eso, se humilla a S\u00ed mismo para morir una muerte sangrienta en lugar nuestro. \u00c9l no merec\u00eda esta muerte, porque era tan puro, tan blanco como la nieve (quiz\u00e1s un cumplimiento de G\u00e9nesis 49:12, \u201csus dientes [siendo] m\u00e1s blancos que la leche\u201d).<\/p>\n
Este tipo de Mes\u00edas humilde y comprometido, que camin\u00f3 entre nosotros y muri\u00f3 por nosotros, es alguien a quien podemos amar y confiar plenamente porque \u00c9l comprende nuestra debilidad y dolor y todas las cosas dif\u00edciles que experimentamos. Hebreos 4:15 lo expresa bien: \u201cPorque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo seg\u00fan nuestra semejanza, pero sin pecado\u201d.<\/p>\n
Debido a que Jes\u00fas nos comprende y muri\u00f3 por nosotros, el ap\u00f3stol Juan dio esta hermosa profec\u00eda al final de la Biblia: \u00a0<\/sup><\/strong><\/p>\n Enjugar\u00e1 Dios toda l\u00e1grima de los ojos de ellos; y ya no habr\u00e1 muerte,\u00a0ni habr\u00e1 m\u00e1s llanto, ni clamor, ni dolor;\u00a0porque las primeras cosas pasaron (Apocalipsis 21:4).<\/p>\n Desde G\u00e9nesis hasta Apocalipsis, desde la profec\u00eda de Jacob hasta la de Juan, puedes confiar en las promesas de nuestro Padre, quien inspir\u00f3 sus palabras. Ruego que les den fuerza para la vida y una verdadera esperanza para el futuro.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" \u00bfAlguna vez ha le\u00eddo la incre\u00edble y peque\u00f1a profec\u00eda de G\u00e9nesis 49:8-12? Su sorprendente predicci\u00f3n de parte de la historia del evangelio puede no serle tan familiar. Contiene uno de los primeros pron\u00f3sticos de la obra vivificante de Jes\u00fas en la cruz: Jud\u00e1, te alabar\u00e1n tus hermanos; tu mano en la cerviz de tus enemigos; […]<\/p>\n","protected":false},"author":321,"featured_media":28366,"comment_status":"closed","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"sync_status":"","episode_type":"","audio_file":"","castos_file_data":"","podmotor_file_id":"","cover_image":"","cover_image_id":"","duration":"","filesize":"","filesize_raw":"","date_recorded":"","explicit":"","block":"","footnotes":""},"categories":[635,2052],"tags":[],"yoast_head":"\n